en tierra, en polvo, en humo, en sombra, en nada.
(Luis de Góngora)
En tierra seca de esperanza
Te amé desde el balcón novicio de la música
desde el jardín de nieve que se atrevió a pensarte
En polvo de estrella adormecido
Te amé con la luz de las guitarras claras
Desde el sueño converso del mar libre
En humo de lluvia desatada
Te amo con el pulso salobre de mis manos
Con el azul exacto del silencio
En sombra inquieta de palmeras
Te amo con la arena de los ojos
Desde el cristal de labios que se atrevió a soñarte
En nada que disuelva el tiempo
de tu mirada quedará el anhelo
Te amaré con el cuerpo que no tengo
Desde el faro amansado que lleva tu nombre
Con el rumor de esa playa que se atrevió a nombrarte
Bartolomé Nieto
Viene apenas cosido al cielo
por el sudor incalculable de un pájaro
por la voz desvencijada de una lámpara
por la hierba exhausta y el abrazo viudo de las rosas
Viene con las farolas devotas y los árboles mansos
con la risa inquebrantable de las caderas vírgenes
con el recuerdo limpio del eco en el aljibe
Viene el mar
con el viento loco y azul
de un día que no existe
Bartolomé Nieto